¡Buen día! Hoy se conmemora April’s Fool Day, la versión estadounidense de nuestro Día de los Inocentes. Algunos evitarán caer en bromas, dudando y verificando todo lo que les digan. Aunque hoy andan muy alertas, el resto del año se creen y divulgan —sin verificar— todo lo que leen o escuchan sobre Seguro Social. Así como los habitantes reaccionan cuando nuestra Maripily regresa a La casa de los famosos, usted se quedará con la boca abierta luego de que aclaremos algunos rumores de pasillo incorrectos sobre Seguro Social. Como decía Doña Jura en El Clon, “¡No es broma, no!”
Aclare sus dudas sobre los beneficios y servicios de Seguro Social llamando a nuestro Centro de Teleservicio al 1-800-772-1213 o accediendo www.segurosocial.gov. Si prefiere visitar nuestras oficinas, llámenos para conocer de antemano los documentos necesarios para aprovechar su visita. Además, puede resolver muchos asuntos por teléfono.
Nuestras leyes son bastante complejas. Por lo tanto, lo que le sucedió a su vecino(a), amigo(a), pana o conocido no necesariamente le aplicará a usted. Si cree todo lo que escucha en la calle sin aclarar sus dudas con nosotros, lamentablemente pudiera perder beneficios o no planificar para hacer ajustes a tiempo.
Supongamos que Pompeyo entiende que todo lo que escucha en la lancha de Cataño, guagua de la AMA, Tren Urbano, barbería o mesa del dominó, incluyendo lo relacionado con el Seguro Social, es correcto. Aunque nunca se ha comunicado con nosotros para aclarar estos rumores, los sigue divulgando por doquier. Hoy acompañaremos a Pompeyo mientras orienta —a su manera— sobre nuestros beneficios. Además, aclararemos si lo que Pompeyo ha dicho es correcto o incorrecto.
Por la mañana, Pompeyo salió a surfear en la playa y saludó a su vecino, Tolomeo, quien tiene 61 años y pico. Mientras esperaban una buena ola, Tolomeo le indica que piensa solicitar su retiro de Seguro Social cuando cumpla sus 62 años. En ese momento y con mucha seguridad y firmeza, Pompeyo le dice, “¡Tú no puedes hacer eso, muchacho! No puedes cobrar Seguro Social hasta tus 70 años porque subieron la edad”.
Lo que Pompeyo dijo es incorrecto. La edad más temprana para cobrar beneficios reducidos de retiro sigue siendo los 62 años. Cada persona debe orientarse uno o dos meses antes de cumplir sus 62 años y decidir, según su situación personal y otros requisitos, si desea cobrarlos desde ese momento o esperar más tiempo para recibir un beneficio mayor. Puede acogerse a retiro en cualquier momento entre los 62 años y 70 años. Si quiere cobrar su beneficio completo —sin reducción—, debe solicitarlo entre los 66 y 67 años, dependiendo de su fecha de nacimiento. También podría esperar a cobrar su beneficio máximo posible a los 70 años.
Mientras almorzaba una tripleta en una panadería, Pompeyo se encontró con Cesarión, quien no ha pagado Seguro Social como camionero independiente. Pompeyo le dice, “Mijo, chequea si vale la pena que pagues el Seguro Social por tu cuenta.”
Lo que Pompeyo dijo es parcialmente correcto e incorrecto. Lo correcto es que Cesarión debe pagar su Seguro Social como cuentapropista radicando el formulario federal 1040SS con Rentas Internas Federal (teléfono 1-800-906-9887). Lo incorrecto es la parte de “si vale la pena”. Además de que pagar su Seguro Social es un requisito de ley —obligatorio—, siempre ‘vale la pena’ pagarlo, pues lo protege a usted, dependientes y sobrevivientes a múltiples beneficios.
Poco después y en la sección de frutas y vegetales del supermercado, Pompeyo saludó a Potino y Dorabella, quienes conviven hace 35 años, pero no se han casado legalmente. Potino trabaja como empleado y Dorabella siempre ha sido ama de casa. Pompeyo les dice, “No hace falta casarse legalmente porque llevan muchísimos años juntos. ¡Ah, y te van a quitar chavos para pagarle Seguro Social a ella!”
Los dos comentarios de Pompeyo son incorrectos. Los cónyuges deben estar casados legalmente —con certificado de matrimonio— y cumplir otros requisitos para cualificar en la cuenta de su pareja. Si no se casan legalmente, Dorabella jamás cualificaría como cónyuge ni viuda bajo la cuenta de su esposo. Como generalmente hay un dinero adicional disponible, no disminuiremos el beneficio de Potino para pagarle a su esposa e hijos elegibles.
Y para completar, Pompeyo dijo anoche a sus panas del dominó, que “El Tío Nobel era quien aprobaba todos los Premios Nobel de la Paz”. ¿En serio? Ya usted sabe cómo yo me siento cuando escucho comentarios y rumores incorrectos sobre Seguro Social.
